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martes, 22 de febrero de 2011

Vivimos en un mundo obsesionado con las celebridades, la fama y lo último en modas.  Usualmente, los adolescentes están en el mismo centro de esta cultura popular y están más expuestos y vulnerables a su influencia.  Además, hay industrias completas que se dedican a mercadear productos, música, películas y modas a los grupos más jóvenes.  Por eso, en ocasiones los padres se sienten indefensos al tratar de competir por la atención de sus hijos y persuadirlos de que algunos de los valores que promueve la cultura popular no son aceptables ni modelos a seguir.
Usted no está sólo si a veces se siente frustrado al tratar de encaminar a sus hijos. Pero la realidad es que la cultura popular vino para quedarse y no hay manera de que los jóvenes la evadan.  Así que no hay otra opción que conocerla, entenderla y ver cómo puede convivir en paz con sus influencias.
Primero, defina sus valores propios y aquellos que son esenciales para reforzarles a sus hijos. Piense mucho en ese concepto antes de conversar con su hijo.  Sea claro y honesto consigo mismo.  Todos sentimos la influencia de la cultura popular y hasta cierto punto usted debe comprenderla y formar una opinión sobre qué le gusta y qué no tolera.  Por ejemplo, piense en cómo la cultura popular ha afectado su forma de pensar, sus decisiones de compra o hasta su imagen personal.
Sus hijos adolescentes también están expuestos a los mensajes más sutiles de la cultura y estos pueden influenciarlos a adoptar comportamientos riesgosos.  Muchas veces estos mensajes tan poderosos son implícitos.  Los jóvenes pueden cantar las letras de canciones famosas y populares sin saber los mensajes codificados en ellas y cómo estos pueden influenciar su manera de pensar.  Otro ejemplo es cómo las revistas de moda y de las celebridades pueden promover el deseo de ser muy delgado o adoptar modas que no son sanas.  A veces, estos valores negativos pueden ser destructivos y llevar a sus hijos a fumar cigarrillos, purgarse o a usar drogas.
Usted es el mejor y más importante ejemplo para sus hijos.  Una vez decida cuáles son los valores de mayor importancia para usted, siente la pauta para que sus hijos los adopten.  Hábleles sobre los valores que se ven a diario y aliéntelos a que definan sus propios valores, a que sean independientes y a que tengan criterio propio.
Otros temas que debe considerar:
  1. ¿Qué tipo de películas permitirá que sus hijos vean y a qué edad—PG, PG-13, NC-17, R?
  2. ¿Dejará que sus hijos escuchen música que tenga letras que usen lenguaje vulgar, sugestivo u obsceno?
  3. ¿Sus hijos podrán ver TV o navegar Internet sin supervisión?
  4. ¿Qué pueden comprar sus hijos con su propio dinero?

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