Fuerzas de seguridad de Bahrein disparan contra manifestantes

La presente ola de descontento en el mundo árabe surge tras los exitosos levantamientos en Túnez y Egipto; siete personas han muerto durante los disturbios de esta semana

Amigos y familiares en el funeral de uno de los manifestantes muertos (AP).

MANAMA.— Las fuerzas de seguridad abrieron fuego contra los manifestantes el viernes por segundo día consecutivo, hiriendo al menos a 50 personas mientras miles desafiaban al gobierno y marchaban hacia la Plaza de la Perla en un levantamiento que intentaba debilitar el control político del gobierno.

De nuevo, las autoridades de Bahrein no dudaron en utilizar la fuerza contra de los manifestantes, que intensificaron las exigencias para derribar a todo el régimen monárquico.

Siete personas han muerto durante los disturbios de esta semana en Bahrein, incluyendo a cinco el jueves, y más de 200 han resultado heridas.

El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, condenó el uso de violencia en contra de los manifestantes en Bahrein, lo mismo que en Libia y Yemen, donde se han reportado medidas enérgicas por parte de los regímenes de la vieja guardia.

La presente ola de descontento en el mundo árabe surge tras los exitosos levantamientos en Túnez y Egipto, lugar donde cientos de miles de personas festejaron el derrocamiento del presidente Hosni Mubarak, que sucedió hace una semana.

Los manifestantes seriamente lesionados fueron trasladados una vez más de emergencia al hospital Salmaniya de Manama, donde también se recibieron muertos y heridos luego que la policía anti motines atacara un campamento de manifestantes en la simbólica plaza el jueves por la mañana.

Varios médicos que conformaban los equipos de atención de emergencia lloraron mientras atendían a los heridos. Las radiografías mostraban balas que seguían alojadas en los cuerpos de las víctimas.

"Esto es una guerra", dijo el médico Bassem Deif, un cirujano ortopedista que examinaba a heridos con huesos destrozados por las balas.

De los 50 heridos, siete se hallaban en condición crítica, informó un funcionario del Ministerio de Salud.

Los manifestantes describieron el viernes un escenario caótico de nubes de gas lacrimógeno, balas disparadas desde distintas direcciones y personas resbalando en albercas de sangre mientras buscaban resguardarse. Algunos testigos aseguraron que los disparos eran realizados desde helicópteros y sitios de francotiradores.

Un camarógrafo de Associated Press vio cómo elementos de las fuerzas armadas disparaban con armamento anti aéreo, montados sobre transporte blindado de personal, realizando aparentes tiros al aire a manera de advertencia en un intento por obligar a los manifestantes a retroceder hacia los cordones de seguridad, aproximadamente a 200 metros (200 yardas) de distancia de la plaza.

Pero después, los soldados apuntaron sus armas a la multitud, dijo un manifestante.

"La gente comenzó a correr hacia todas partes y las balas iban en el aíre", dijo Ali al-Haji, un cajero de banco de 27 años. "Vi que la gente recibía disparos en las piernas, el pecho y a un hombre que sangraba de la cabeza".